Si me quedo comienza con la violonchelista Mia Hall, de diecisiete años, que se despierta con una fina capa de nieve en su césped. En Oregon, esta pequeña cantidad de nieve es suficiente para provocar el cierre de escuelas. El hermano de Mia, Teddy, y su padre, un profesor de inglés de secundaria, también tienen el día libre, por lo que su madre se toma el día libre del trabajo. La familia se amontona en su Buick oxidado, planeando salir para una excursión de un día para visitar a amigos y familiares.
Una colisión en la carretera mata a la madre y al padre de Mia. Después del accidente, el cuerpo de Mia entra en coma, mientras que su conciencia puede observar la escena en una experiencia extracorporal. No siente dolor y se pregunta si está muerta.
Los paramédicos llevan a Mia y Teddy al hospital local, donde Mia ve a la amiga de sus padres, Willow, de turno como enfermera. Mia es transportada en helicóptero a un hospital en Portland. Mientras su cuerpo está en la unidad de cuidados intensivos, Mia observa a sus abuelos, su mejor amiga Kim y su novio Adam mientras esperan y se preocupan en el hospital. Mientras tanto, Mia reflexiona sobre los recuerdos de su familia y amigos. Recientemente se postuló para la escuela de música Juilliard en la ciudad de Nueva York, lo que agregó tensión a la relación entre ella y Adam.
Mia escucha a sus abuelos discutir de quién es la responsabilidad de decidir si Mia vive o muere. Mia se da cuenta de que la elección es suya. Más tarde, Mia se entera de que Teddy ha muerto. Reflexiona sobre el dolor que le causaría vivir sin su familia y decide que preferiría no despertar del coma.
En la escena final del libro, Adam coloca audífonos sobre los oídos de Mia y reproduce una grabación de Yo-Yo Ma, su violonchelista favorito. Al escuchar la música, Mia considera la posibilidad de un futuro brillante y, al mismo tiempo, lamenta lo que ha perdido. Las sensaciones de dolor y optimismo la abruman hasta que regresa a su cuerpo y aprieta la mano de Adam. Se despierta del coma al escuchar a Adam decir su nombre.