Resumen y Análisis Acto II: Llegada del Mensajero
La depresión de Vladimir se ve repentinamente interrumpida por la aparición de un niño. Como este chico dice que no estuvo aquí ayer, tiene que ser otra persona. Sin embargo, el mensaje que trae es idéntico al que trajo ayer un chico: Sr. Godot no vendrá esta noche, pero seguramente vendrá mañana, sin falta. Así, Vladimir descubre que no hay absolutamente nada que hacer más que esperar a Godot. Pero en vista del mensaje del chico del día anterior, la certeza de que Godot vendrá mañana carece de convicción.
Al interrogar más al niño, Vladimir descubre dos cosas: que el Sr. Godot «no hace nada» y que tiene barba blanca. Dado que Dios a veces es visto como una Entidad Suprema que no hace nada y tiene una larga barba blanca, entonces si Godot es Dios, puede haber poca o ninguna esperanza de que Dios intervenga en los asuntos de los hombres. En cambio, el hombre debe continuar tropezando con este estercolero, este cubo de cenizas de un mundo. Vladimir le dice al niño que informe al Sr. Godot que «me viste». Vladimir insiste tanto en que el niño realmente lo ha visto que da «un salto repentino hacia adelante». Esto asusta al niño, y rápidamente huye del escenario.