Ensayos críticos La estructura narrativa
Si bien Lockwood y Nelly sirven como los narradores obvios, otros se intercalan a lo largo de la novela: Heathcliff, Isabella, Cathy e incluso Zillah, quienes narran uno o dos capítulos, brindando información sobre el desarrollo de los personajes y la trama. Catherine no habla directamente a los lectores (excepto en los diálogos citados), pero a través de su diario relata aspectos importantes de la infancia que ella y Heathcliff compartieron en el páramo y el trato que recibieron a manos de Joseph y Hindley. Todas las voces se entrelazan para proporcionar una narrativa coral. Inicialmente hablan con Lockwood, respondiendo a sus preguntas, pero también hablan con los lectores, brindando varios puntos de vista sobre las enredadas vidas de los habitantes de Thrushcross Grange y Cumbres Borrascosas.
Brontë parece presentar observadores objetivos, en un intento de dejar que la historia hable por sí misma. Presumiblemente, las observaciones objetivas hechas por personas ajenas no estarían contaminadas por la participación directa; desafortunadamente, una mirada más cercana a estos dos narradores aparentemente objetivos revela su parcialidad.
Por ejemplo, la narrativa de Lockwood permite a los lectores comenzar la historia cuando la mayor parte de la acción ha terminado. Aunque la historia principal se cuenta en un flashback, tener a Lockwood interactuando con Heathcliff y los demás en Cumbres Borrascosas cambia inmediatamente su objetividad. Lo que registra en su diario no es solo lo que cuenta Nelly, sino sus recuerdos e interpretación del cuento de Nelly. Asimismo, la narrativa de Nelly involucra directamente al lector y lo involucra en la acción. Al contar el pasado, puede presagiar eventos futuros, lo que crea suspenso y atrae aún más a los lectores. Pero su participación es problemática porque es hipócrita en sus acciones: a veces elige a Edgar sobre Heathcliff (y viceversa), y a veces trabaja con Cathy, otras veces traiciona la confianza de Cathy. Sin embargo, es una narradora bastante atractiva, por lo que los lectores perdonan fácilmente sus defectos.
En última instancia, tanto Lockwood como Nelly son meros facilitadores que permiten a los lectores entrar en el mundo de la Cumbres borrascosas. Todos los lectores saben más que cualquier narrador y, por lo tanto, se fortalecen a medida que leen.