Análisis del personaje de George Osborne
George Sedley Osborne, ahijado de John Sedley, estuvo cerca de la familia Sedley toda su vida. Él y Joseph estudiaron juntos. El viejo Osborne le ordenó que se casara con Amelia, y ese plan se entendió durante años.
George Osborne pertenece a Vanity Fair. Cuando era niño, se avergonzaba de William Dobbin, su protector en la escuela, porque siente que Dobbin es de un estatus social más bajo. Sus hermanas lo convencen de que es uno de los personajes más meritorios del ejército británico y «se entregó a ser amado con mucha resignación».
George ama a Amelia a su manera, pero se ama más a sí mismo; ya menudo, cuando sus hermanas creen que está con Amelia, está jugando, bebiendo o yendo al teatro. Popular entre los hombres del regimiento por su excelente deportividad, también encanta a las mujeres:
Sus bigotes la impresionaron. . . George parecía a la vez arrogante y melancólico, lánguido y feroz. Parecía un hombre que tenía pasiones y secretos y angustia y aventuras privadas y angustiosas. Su voz era rica y profunda. Decía que era una noche cálida, o le pedía hielo a su pareja, con un tono tan triste y confidencial como si le contara la muerte de su madre, o presagiara una declaración de amor. Pisoteó a todos los jóvenes del círculo de su padre y fue el héroe entre esos hombres de tercera categoría.
Al tener un amigo fiel y generoso en William Dobbin, George no lo aprecia. Furioso con Dobbin por contarle al regimiento sobre Amelia, George pronto olvida su enojo, pide dinero prestado a Dobbin para comprarle un regalo a Amelia, pero se compra un broche.
George corteja el conocimiento de la nobleza, como todos los verdaderos habitantes de Vanity Fair, pero no cuenta historias sobre damas. Egoísta y egocéntrico, toma el amor y la lealtad de Amelia como algo que le corresponde y, bajo la presión de Dobbin, se casa con ella. Cuando lo desheredan, culpa a Dobbin y dice que perdió su dinero por sentimientos estúpidos. Pero cuando sus hermanas hablan en contra de Amelia, él sale en su defensa a pesar de su apariencia y la ira de su padre.
Enamorado de Becky, George le pide que se escape con él, pero interviene la Batalla de Waterloo. Cuando George se da cuenta de que irá a la batalla y es posible que nunca vuelva a ver a Amelia, se siente abrumado por el remordimiento y le encarga a William Dobbin que la cuide. Como excusa para la irresponsabilidad de George, Thackeray señala que la actitud del anciano Osborne ha sido indulgente con todo tipo de salvajismo que muestra George. Old Osborne solo se opone a los juegos de azar y George juega al escondite.
Mientras Amelia considera la muerte de George la mayor tragedia que le pudo haber ocurrido, el lector se da cuenta de que si hubiera vivido, su vida habría sido más triste. A veces, George alcanza proporciones heroicas, como cuando defiende a Amelia de su familia. La inconsistencia de su carácter: la voluntad de desafiar a otros en nombre de su amada y también su voluntad de traicionarla, marca su ciudadanía en Vanity Fair.