Resumen y Análisis Acto I: Escena 5
Resumen
El escenario de esta breve escena está fuera del palacio de Goneril. Lear le indica a Kent que vaya inmediatamente al palacio de Regan y entregue una carta. Cuando Kent se va, el Loco intenta distraer al rey con comentarios tontos, pero su contenido apunta irónicamente a las acciones de Lear. El tormento del rey es obvio cuando lamenta el trato que le dio a Cordelia.
Lear expresa sus primeras preocupaciones, una premonición, por su cordura. Pronto los caballos están listos y el rey emprende su viaje hacia el palacio de su segunda hija.
Análisis
En la escena 5, el rey está claramente asustado y preocupado por su futuro, aunque sigue esperando que se pueda contar con Regan para que le brinde refugio. Lear también expresa temor por su cordura: «¡Oh, no me dejes enojar, no te enojes, cielo! No me volvería loco. Mantenme tranquilo, no me volvería loco» (I.5.43 -44).
Este llamado presagia eventos que ocurrirán más adelante en la obra. Este breve llamamiento también contiene una oración a una deidad. Aunque la configuración de Rey Lear es anterior al cristianismo, Lear todavía depende de un dios para guiarlo y protegerlo. El Loco no le da descanso a Lear en esta escena, ya que continúa recordándole al rey los errores que ha cometido y la precaria posición en la que se ha colocado. El Loco parece cruel una vez más, pero Lear finalmente comienza a comprender que su estupidez lo ha llevado a esta situación actual.
Los pensamientos del rey una vez más se vuelven remordimientos por su comportamiento hacia Cordelia: «La he agraviado» (I.5.24). Como este comentario se ofrece sin contexto, revela que Lear notó un destello de comprensión de su propia conducta, acciones de las que se arrepintió. Esta breve mención de Cordelia también le recuerda al público que ella continúa desempeñando un papel importante en la obra, aunque no reaparece por algún tiempo.
Glosario
Bolas de carne frita sabañones agrietados o ulcerados, especialmente en el talón.