Resumen y análisis: Hijos de Adán como Adán en la madrugada»»
El poeta se siente Adán cuando camina por la mañana después de un sueño reparador. Le pide al lector que lo mire y lo toque sin miedo: «Tócame, toca con la palma de tu mano mi cuerpo mientras paso, / No tengas miedo de mi cuerpo».
Este, el poema final de hijos de adán, contiene el pensamiento central de Whitman en este grupo, que Adán regresa continuamente a la tierra en la forma del hombre moderno. Es consciente de la belleza, la fuerza y la vitalidad de su cuerpo. El verbo central de este poema es «tocar», que es un medio de percepción sensorial, placer sexual y realización espiritual. Hay una imagen de Cristo en este Adán: su toque encierra la promesa de curar a la sociedad enferma. El poeta hace un llamado al lector para que lo escuche mientras expone su mensaje de sexo alegre y natural.
